A pesar de que esta estación es sinónimo de vacaciones, estudiar o trabajar en verano es algo más habitual de lo que puedas pensar. Si también es tu caso, en este post te ofrecemos algunas claves para que aproveches al máximo el tiempo que dediques a tus obligaciones. Así, cuanto más productivo seas, antes podrás dejar a un lado tus tareas para disfrutar del tiempo de ocio. ¡Descúbrelas!
Estudiar o trabajar en verano
El verano es la época ideal para que te saques un dinero extra trabajando o para que adquieras nuevos conocimientos. Estudiar idiomas, hacer un curso intensivo de literatura o prepararte para los exámenes universitarios de septiembre son algunas de las opciones a tu alcance.
Con independencia de cuál sea tu plan para los meses de junio, julio, agosto y parte de septiembre, también podrás divertirte y descansar. Para ello, solo tienes que organizarte y aprender unas técnicas de productividad. Con ellas, conseguirás los resultados que persigues en el menor tiempo posible.
Técnicas de productividad
Sacar el máximo partido al día y cumplir con tus cometidos laborales o educativos es posible si implementas las técnicas de las que te hablamos aquí. Se trata de unas herramientas muy útiles que puedes poner en práctica en cualquier momento. Sus resultados te convencerán desde el primer instante, dado que tu productividad se verá incrementada con creces.
1. Planifica cada jornada hora a hora
Establecer un horario día a día con una distribución de las tareas que debas afrontar te ayudará a organizarte. De esta forma, te fijarás una hora de inicio y otra de finalización de cada obligación que debas afrontar. Sabiendo de cuánto tiempo dispones en cada caso, tratarás de amortizarlo todo lo posible.
Recuerda que el día tiene 24 horas. Dedica ocho a trabajar, ocho a divertirte y las ocho restantes a dormir. Como ves, hay tiempo para todo.
2. Establece prioridades
Antes de que empieces a agobiarte por la cantidad de tareas que has de llevar a cabo, establece prioridades. Para ello, elabora un listado y asigna a cada una de ellas una categoría:
- Importante y urgente.
- Importante, pero no urgente.
- Menos importante.
Comienza por aquellas que sean más importantes y urgentes, como los trabajos que tienen un plazo de entrega más inmediato. Lo mismo ocurre con las asignaturas de las que te examines en breve.
Una vez hayas finalizado las urgentes, aborda las siguientes que necesites llevar a cabo con no tanta rapidez. Y continúa así con el resto que tengas a la espera hasta concluir con el listado en su totalidad.
3. Crea un espacio de trabajo o estudio
Destina una habitación o parte de una estancia de tu hogar para trabajar o estudiar. Debe ser un espacio agradable, bien iluminado, ventilado y carente de distracciones. Olvídate de la televisión y si pones música, que sea únicamente para contribuir a concentrarte.
Procura ordenarlo al final del día para que cuando retomes tus labores, esté en perfectas condiciones. Además, este sencillo gesto te ayudará a no perder el tiempo buscando papeles u otros elementos cuando los requieras.
4. Haz descansos y prémiate por tus logros
Para evitar cansarte, haz una pausa de unos minutos cada hora. Puedes dedicarlos, por ejemplo, a disfrutar de un café, levantarte y tomar algo de aire fresco o consultar tus mensajes de móvil. Ese paréntesis te permitirá despejar tu mente y reanudar tu actividad con fuerzas renovadas.
Por otra parte, cada vez que finalices un trabajo o unos ejercicios escolares, no dudes en premiarte. Puedes regalarte un pequeño detalle que te haga especial ilusión:
- Comparte una revista de una temática que te apasione.
- Tomar tu postre favorito.
- Dar un paseo por un rincón que te guste de la ciudad.
- Elegir un día de playa.
- Hacer una pequeña excursión.
Material para aumentar la productividad
Ahora que ya conoces qué técnicas son tus aliadas a la hora de ser más productivo, te invitamos a ir un paso más allá. ¿Por qué no recurres al material que te proporciona una ayuda extra a la hora de acometer tus tareas? En Catwalk somos especialistas en artículos de papelería, lectura y viaje. Escoge los elementos adecuados para incluirlos en tus rutinas diarias de trabajo o estudio. Notarás la diferencia desde el primer momento.
Etiquetas adhesivas organizadoras
Estas etiquetas son idóneas para organizar papeles, apuntes de clase, carpetas, cuadernos y los más diversos objetos. Las hallarás en diferentes colores, para establecer diferenciaciones por temas, por prioridad, etc.
Otra de sus ventajas es que te ofrecen la posibilidad de personalizar los artículos en los que las coloques. Escribe sobre su superficie aquello que desees identificar.
Notebook
Es uno de los artículos imprescindibles para quienes tratan de organizar su trabajo o las horas de estudio. Como su nombre indica, este tipo de libreta es perfecta para tomar notas de todo tipo. Te aconsejamos hacerte también con un marcapáginas. De este modo, podrás hacer uso del mismo siempre que quieras señalar la página que necesites recordar.
La libreta, nuestra compañera inseparable
Opta por una libreta de un tamaño que te permita llevarla siempre contigo. Así, te asegurarás poder apuntar todo aquello que quieras recordar:
- Las citas más importantes.
- Las ideas que te inspiran.
- Un boceto para reproducir después en forma de dibujo elaborado.
- Esquemas de las lecciones que estudies.
- Las tareas pendientes.
¿Qué gadget es más útil?
Tú mismo podrás responder a esta pregunta en función de los trabajos que desarrolles. ¿Qué gadget te puede ayudar más? Pueden ser unos auriculares, un ratón o un teclado inalámbrico, un ordenador portátil, una lámpara de estudio, una llave USB, etc.
La utilidad dependerá de tus preferencias y de las actividades que estés obligado a llevar a cabo. Piensa en cuál precisas.
En conclusión, estudiar o trabajar en verano te será más sencillo y productivo con las recomendaciones que hemos recopilado en esta entrada. Ponlas en práctica a partir de hoy mismo y lograrás sacar el máximo partido a este verano sin dejar de divertirte. Todos tus planes tendrán cabida a lo largo de las próximas semanas.
